Izquierda Unida Castilla-La Mancha

Izquierda Unida CLM apoya las reivindicaciones de las trabajadoras de la limpieza de Ciudad Real, Cuenca, Toledo y Guadalajara

También insta a la JCCM a modificar el decreto de servicios mínimos que hace prácticamente inviable la huelga convocada por dichas trabajadoras para los próximos nueve días

Los sindicatos UGT y CC.OO. han convocado a las trabajadoras de la limpieza de edificios de las provincias de Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara y Toledo a una huelga de nueve días, a partir del 10 de enero, en apoyo a la firma de nuevos convenios colectivos que contemplen una mejora sustancial de sus condiciones laborales: un incremento del salario en un 4% y una reducción de la jornada a 37 horas semanales.

Se trata de dos reivindicaciones muy justas y razonables. Por un lado, exigir una subida salarial del 4%, cuando el IPC de 2022 ha escalado hasta el 8,5%, es muy prudente, máxime si tenemos en cuenta que la patronal del sector incrementó notablemente sus ingresos durante la pandemia de COVID-19, período en el que se reforzaron los servicios de limpieza en todos los edificios públicos y las empresas del sector no se vieron obligadas a presentar ERTES. En consecuencia, es justo que esas empresas compartan ahora una parte de los beneficios con las trabajadoras de la limpieza.

Y, por otro lado, en un sector de la actividad económica en el que tres de cada cuatro trabajadoras tienen contrato a tiempo parcial y, en muchos supuestos, con obligación de prestar servicios en varios centros de trabajo, la reducción de la jornada semanal de trabajo supondría un incremento de las percepciones de dichas trabajadoras y, por consiguiente, un aumento de las bases de cotización por las que se regularan las prestaciones de la Seguridad Social (incapacidad temporal, invalidez, jubilación).

Asimismo, rechazamos de plano el decreto de servicios mínimos emitido por el gobierno regional de la JCCM que, en la mayoría de los centros de trabajo, obliga al 100% de las trabajadoras de la limpieza. Es indecente que García-Page se preocupe más por el servicio en sí que por la dignidad de las condiciones laborales de las trabajadoras que prestan dicho servicio. Estas trabajadoras, que fueron consideradas esenciales durante la pandemia y que realizaron entonces una labor encomiable y sacrificada, habiendo puesto sus vidas en riesgo al convivir directamente con el virus, son ahora injustamente olvidadas por la administración regional.

En este sentido, desde Izquierda Unida CLM, requerimos a las administraciones públicas que tengan privatizada la prestación del servicio de limpieza de edificios públicos (hospitales, residencias, centros educativos, etc.) para que inicien un proceso de negociación con los representantes sindicales para establecer unos servicios mínimos adecuados y que permitan el efectivo ejercicio del derecho constitucional de huelga.

Por último, nuestro partido se compromete con las trabajadoras de la limpieza de edificios, así como con el resto de los trabajadores y las trabajadoras de todos los servicios públicos esenciales privatizados que allí donde gobernemos (autonomía y municipios), vamos a procurar la gestión directa de todos esos servicios, pues dicha gestión será más económica, eficiente y, sobre todo, garantizará la dignidad de los contratos de trabajo de quienes prestan los servicios.

J. Gregorio García-Dotor

Responsable de Empleo de la Colegiada Regional de Izquierda Unida CLM.