Alberto Parrilla advierte que el cierre de camas, el colapso de AP y de Urgencias son consecuencia “del recorte en el presupuesto de Sanidad y de la no recuperación de los estándares de la plantilla que redujo Cospedal”
El responsable de Sanidad de Izquierda Unida Castilla-La Mancha, Alberto Parrilla, apoya las reivindicaciones de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias, y exige un cambio en el modelo sanitario regional ante “siete años de promesas incumplidas que, al final, generan graves consecuencias que acaban pagando los ciudadanos”
La Consejería de Sanidad cuenta este año con 85 millones menos en su dotación a pesar de que las cuentas generales han aumentado en valores absolutos, un “importante recorte” que queda contemplado en la deficiente financiación de la Atención Primaria, en la escasez de recursos de personal en los servicios de Urgencias, y en la falta de previsión e incapacidad de la Administración regional evidenciada en el hecho de que este verano se cerrarán 200 camas hospitalarias.
En este contexto, y recogiendo las denuncias emitidas tanto por el Sindicato de Enfermería (SATSE) como por la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES), el responsable regional de Sanidad de Izquierda Unida advierte que el servicio sanitario necesita más recursos ante el auge de la séptima ola de coronavirus. “Tal como ha ocurrido en otros períodos estivales contamos con el cierre de cerca de 200 camas en los hospitales de Castilla-La Mancha, 111 en la provincia de Toledo, 40 camas en los hospitales de la provincia de Albacete y 50 en Ciudad Real, y alertamos que también se realizarán en consultas externas, pruebas diagnósticas e intervenciones quirúrgicas durante los meses de julio, agosto y septiembre.
Una realidad, denuncia Alberto Parrilla, que explica que en Castilla-La Mancha tanto la Atención Primaria como las Urgencias “se encuentren colapsadas” porque, tal y como viene denunciando Izquierda Unida, la financiación de la Atención Primaria «apenas representa el 16% de la inversión, muy lejos del 25% ciento recomendado por la Organización Mundial de la Salud».
Por ello, la propuesta de IU insiste en la necesidad de “aumentar la inversión en este servicio y en las actuaciones de prevención y tratamiento” y “mejorar las condiciones laborales de los trabajadores del SESCAM llamadas a corregir “problemas estructurales” como el funcionamiento de plantillas en servicios mínimos, y la no cobertura de bajas, vacaciones u otras incidencias.
En este sentido, Alberto Parrilla insta, una vez más, a “incrementar el presupuesto de Sanidad y la recuperar los estándares de la plantilla que recortó Cospedal” con el objetivo de “revertir los siete años de promesas incumplidas por parte del Gobierno socialista” porque “son los ciudadanos y las ciudadanas de la región los que siguen pagando las consecuencias de este abandono público”.