Izquierda Unida Castilla-La Mancha

Sánchez: “Estos son unos presupuestos antisociales, realizados opacamente y que no reconocen el cambio de ciclo político. Merecen su devolución.”

El Grupo Provincial de IU Cuenca ha votado en contra de los presupuestos de la Diputación en su conjunto por no recoger el cambio social que pide la calle.

Sánchez: “Nosotras apostábamos por un presupuesto más social y con estos mimbres no se puede caminar por ahí. Hemos intentado hablar con el PP pero no han querido conversar sobre los presupuestos: el responsable de Hacienda siempre está muy ocupado”

El Grupo Provincial en la Diputación de Izquierda Unida ha rechazado el presupuesto de la Diputación para 2016 por completo. Para la formación, en primer lugar, es increíble que el PP no haya querido hablar sobre nada del presupuesto y que no solo no se camine hacia unos presupuestos más abiertos y participativos con la ciudadanía, es que resultan lejanos incluso para los grupos políticos. Son los presupuestos del PP, únicamente, y es necesaria su devolución.

De hecho, hay que manifestar que el presupuesto en Inversiones reales para el año 2016 ha disminuido en más de 600.000 euros, un 4,6% menos que el del presente año, por más que quiera sumar otros capítulos para hacernos ver que las inversiones han crecido. Los documentos estarán expuestos al público para que quien quiera lo pueda comprobar.

Por otro lado, la Diputada Provincial, Ana Sánchez, manifiesta que estos presupuestos no recogen ninguno de los temas que se vienen tratando “ni otras propuestas interesantes que IU considera que serían muy beneficiosas para la provincia, como es la creación y puesta en marcha de equipos u organismos de limpieza de montes, mantenimiento de los mismos y prevención de incendios en los montes de nuestra provincia; dotados convenientemente de medios técnicos y humanos, y que creen puestos de trabajo dignos, que mantengan durante todo el año el buen estado de nuestra riqueza forestal”.  Seguimos sin encontrar nada relativo a la estación de bomberos en La Mancha o al centro de intercambio y transformación que estuvo previsto construir en localidades como Las Pedroñeras o Mota del Cuervo. “

Por otro lado, Sánchez ha puesto sobre la mesa algunas cuestiones que debería haberse, como mínimo, estudiado. “Nosotras y nosotros creemos que estos presupuestos deberían haber avanzado en la transparencia, en el desarrollo y potenciación de energías renovables y proyectos de empleo que fijen población, en la dotación presupuestaria para luchar contra la pobreza energética que es un problema más del drama del inmenso paro y abandono que existe en esta provincia y que la propia Cáritas sigue denunciando. Este presupuesto, además, sigue dejando a un grupo sin financiación, lo que es una falta  de respeto. “No puede ser que el equipo de gobierno siga llevándose unos 600.000 euros en sueldos mientras que toda una parte del electorado no puede contar ni con un administrativo. Las diputaciones no pueden ser cortijos dependiendo de quién mande, aquí todo el mundo tiene su papel y hay que respetarlo.”

Además, Sánchez ha puesto en valor el excesivo peso que este presupuesto tiene para “colaborar” con la Iglesia Católica: la nada despreciable cantidad de 383.000 euros, que supera las cantidades destinadas a Servicios Sociales para casos urgentes (cooperación humanitaria, ayudas de carácter social….), y ha pedido que esas cantidades se dediquen a estos últimos fines.

Algo parecido pasa con las subvenciones al Ministerio del Interior para mantenimiento de casas-cuartel de la Guardia Civil: 100.000 euros. IU ha manifestado que la Diputación debe dedicarse a apoyar a los pueblos de la provincia y no financiar los cuarteles que cada Ministerio tiene, y que es éste el encargado de hacerlo.

Sánchez ha solicitado como alternativa a esta partida que se dedicara a ayudas para reparación de casas en mal estado en los pueblos pequeños de nuestra provincia, tal como algunos de ellos nos han planteado, a sus futuros moradores, que se comprometan a ir a vivir a los mismos. Esta sería una forma de fijar población en los mismos, e intentar frenar en alguna medida la despoblación tan inmensa que sufre nuestra provincia.