Izquierda Unida Castilla-La Mancha

El PP rectifica parcialmente el apartheid sanitario de los inmigrantes.

El Gobierno central ha utilizado a los inmigrantes para justificar los recortes sanitarios

Desde el área de Cooperación e Inmigración de IU CLM criticamos que a dos meses de las próximas elecciones municipales y regionales el PP haya anunciado la readmisión parcial en atención primaria de los inmigrantes, tras dos años de exclusión sanitaria, es una muestra más del uso electoralista que el Gobierno central hace de los servicios públicos.

La atención sanitaria es un asunto lo suficientemente importante y vital para dejarlo al margen de decisiones partidistas oportunistas, y la excluyente modificación que llevó a cabo el Gobierno de Rajoy, que ahora se ha visto obligado matizar es una prueba más del cinismo y la insensibilidad social del PP.

Una rectificación que demuestra la improvisación con la que actúa el Ministerio de Sanidad y que, además, se queda a medio camino, pues según lo anunciado hasta ahora, los inmigrantes no van a recuperar la tarjeta sanitaria, lo que les impedirá recibir atención en todo el Estado español, pues solo serán atendidos en las comunidades donde residan, o disponer de fármacos financiados.

El PP dejó sin sanidad y control médico a más de 800.000 personas en abril de 2012, una decisión errónea que, como se ha demostrado con el tiempo, ni ha solucionado el gasto farmacéutico (volvió a subir el año pasado) ni el colapso de los servicios de urgencias, que la propia Defensora del Pueblo atribuyó a la escasez de personal de atención y no es fruto del supuesto “abuso” de los servicios sanitarios del que el PP responsabilizó a los inmigrantes.

Más allá del oportunismo político de la medida, el PP sigue empeñado en crear diferencias sociales, en crear un apartheid sanitario, discriminando a los inmigrantes, un blanco fácil con el que justificar sus recortes sanitarios, con los que han transformado un derecho universal en uno limitado.

En Castilla-La Mancha, desde 2012, año en que entró en vigor la reforma sanitaria que ahora se rectifica, Varias ONGs, entre ellos Médicos del Mundo, han venido denunciando casos de mujeres embarazadas y menores de edad a quienes se les ha negado, en primera instancia, el acceso a la atención médica o a la tramitación de la tarjeta sanitaria, incluso en el caso de personas que poseían tarjeta de residencia válida. Además, se declaran más de una veintena de pacientes aquejados por enfermedades graves o crónicas a quienes se les ha negado la atención sanitaria.

En la región son múltiples los ejemplos de la decadencia del sistema de salud: pacientes que han muerto en los pasillos de los hospitales, cierre de plantas y de camas, saturación de las listas de espera para intervenciones quirúrgicas, la implantación de un sistema de lista de espera viajera por la cual cientos de pacientes han sido derivados a clínicas privadas de Madrid para ser operados, que han tenido que viajar en un mismo día cientos de kilómetros, además de ser la única región del estado en no aplicar ninguna medida compensatoria para paliar los efectos del decreto que excluye a los inmigrantes indocumentados de la atención sanitaria.

 

 

 

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