La atención a la dependencia está reñida con las prioridades de Cospedal.
Desde IU-CLM valoramos los datos sobre aplicación de la Ley de Dependencia como uno de los mayores despropósitos del gobierno popular en la región.
Daniel Martínez: “El PP aplica medidas economicistas que atentan contra las y los dependientes y que no han arreglado lo más mínimo la economía castellano manchega.”
(Toledo, 20 de Agosto de 2014). El Coordinador Regional de IU-CLM, Daniel Martínez Sáez, ha querido aprovechar la oportunidad para valorar lo que, para el dirigente castellano manchego, es uno de los mayores desastres del gobierno regional de la señora De Cospedal: la atención a los dependientes y sus familias.
Los datos no dejan lugar a dudas: más de 9000 dependientes reconocidos sin prestación, más de 40.000 personas fuera de las prestaciones por dependencia, reducción continua de las prestaciones por cuidados en el entorno familiar (más de 7000 desde el aterrizaje del PP en nuestra región), reducción del número de personas en condición de gran dependiente, etc…
Así, y tras la publicación, por parte del IMSERSO, de los datos sobre la Ley de Dependencia en nuestra región hasta la mitad del año, Martínez entiende que “el PP no mantiene entre sus prioridades la aplicación de la ley de Dependencia y las consecuencias las están pagando, como en tantas otras ocasiones, las personas dependientes y sus familias que ninguna culpa tienen y que ven como su gobierno busca, una y otra vez, la fórmula para desprotegerlos en vez de, como sería lógico y normal, trabajar por alcanzar la máxima aplicación de la citada Ley”.
De la misma manera, Martínez ha asegurado que no cree que el PP, y De Cospedal a la cabeza, levanten el pie del acelerador de los recortes en lo que queda de legislatura, y que tendrá que ser la ciudadanía la que tome conciencia de su poder y decida acabar en las urnas con una gestión basada en el sufrimiento de la ciudadanía para favorecer a unos pocos, en los recortes, la privatización de los servicios públicos e incluso el aumentos de impuestos directos y para colmo, sin conseguir los que serían sus objetivos económicos: ha aumentado el desempleo, la precariedad y la pobreza, no se reduce el déficit y hay muy pocos elementos que indiquen mejoras reales de la economía castellano manchega.