Izquierda Unida Castilla-La Mancha

Crespo (IU CLM): “La brecha entre los que más y menos tienen está aumentando en la región y está siendo favorecida por el Gobierno regional”

Izquierda Unida Castilla-La Mancha reclama, una vez más, “que los Fondos Europeos sirvan para cambiar los modelos que no generan igualdad” y no para “beneficiar a las empresas de los amigos del Gobierno regional, que han incrementado sus beneficios en detrimento de la mayoría social de esta región”.

 El coordinador regional de Izquierda Unida en Castilla-La Mancha, Juan Ramón Crespo, explica que la región mantiene un índice estructural de personas en riesgo de vulnerabilidad y de trabajadores empobrecidos cercano al 35%, y ninguna de las políticas que se han ejecutado hasta ahora han erradicado esa brecha social “insostenible”. Ante esta realidad, Izquierda Unida Castilla-La Mancha considera que los presupuestos para este año perpetúan un modelo de desarrollo que genera una estructura social que acrecienta la distancia entre la mayoría social -con problemas de vulnerabilidad económica que encuentran los servicios públicos cada vez menos accesibles y privatizados-, y una minoría que se sigue lucrando con las posibilidades que ofrecen las políticas regionales.

Por ello, y contraponiendo los datos ofrecidos por la Fundación Fomento de Estudios Sociales y de Sociología Aplicada sobre el aumento de la desigualdad social y económica, y los aportados por el Gobierno regional en torno a la exportaciones, el coordinador de Izquierda Unida Castilla-La Mancha comprueba “con desesperación que la parálisis de Emiliano García-Page está llegando de lleno a los Fondos Europeos”. De hecho, Juan Ramón Crespo denuncia que la llegada a la región de “millones de euros no está sirviendo ni para cambiar el modelo de producción, ni para industrializar la región, ni para crear puestos de trabajo estables y dignamente retribuidos”.

Porque si bien hay datos que, en apariencia, son tan favorables como los 9.000 millones de euros facturados en exportaciones, asegura Juan Ramón Crespo que “al analizarlo comprobamos que tan sólo corresponden a 1.500 empresas, del total de 130.000 instaladas en Castilla-La Mancha, que son las que se benefician de los Fondos”. Esto denota, cita el coordinador regional de Izquierda Unida Castilla-La Mancha, “que la brecha entre los que más y menos tienen se están agrandando en la región y está siendo favorecida por el Gobierno regional”. El dato “incontestable de que casi el 33% de la sociedad castellanomanchega está rozando la pobreza y la exclusión social” es un dato que debería hacer pensar lo que se está haciendo, ya que la brecha entre ricos y pobres “está aumentando, y está siendo favorecida por el Gobierno con Fondos Europeos” que deberían, asevera Crespo, “servir justamente para lo contrario”.

Por eso, Izquierda Unida Castilla-La Mancha reclama, una vez más, “que los Fondos sirvan para cambiar los modelos que no generan igualdad y que, por ello, sirven para favorecer a la empresas de los amigos del Gobierno regional, que han incrementado sus beneficios en detrimento de la mayoría social de esta región”.

Grandes beneficios industriales en muy pocas manos

Juan Ramón Crespo evidencia que el mismo día en el que la Fundación FOESSA (Fomento de Estudios Sociales y de Sociología Aplicada) publicó el informe sobre la Evolución de la Cohesión Social y las Consecuencias de la Covid-19 en España, en el que se confirma una creciente desigualdad que llega a un 37% derivado de una pujante nueva clase social -los trabajadores empobrecidos- la Consejera de Industria anuncia “las bondades de las exportaciones de las empresas castellano-manchegas, que han facturado más de 9.000 millones de euros”. Izquierda Unida Castilla-La Mancha relaciona ambos datos confirmando que “de las más de 130.000 empresas, sólo 1.500 han exportado más de 50.000 euros”, lo que denota que “el reparto de esos grandes beneficios industriales está en muy pocas manos”.

A ello se une el incremento presupuestario para la educación privada concertada, cada vez menos accesible a la clase trabajadora, el descenso presupuestario en materia sanitaria y el mantenimiento de un modelo de desarrollo económico y social que incrementa las partidas para turismo y artesanía, mientras elimina 66 millones de euros en inversión destinado al proceso industrializador. Esa es “la hoja de ruta que quiere tomar el Gobierno regional para dejar a la región en el mismo sitio, haciendo lo mismo que nos ha traído hasta aquí y, por lo tanto, perpetuando una dinámica perversa para la mayoría social que es la clase trabajadora”.

Izquierda Unida Castilla-La Mancha insiste en la necesidad de conformar en la región “un modelo de desarrollo industrial sostenible, políticas que garanticen la permanencia de las poblaciones en los municipios de donde huyen gracias a el modelo planteado por el gobierno regional, y políticas que fijen a los jóvenes en su región en vez de obligarles a salir de ella en busca de un futuro que no aquí no se los ofrece”. Porque Castilla-La Mancha requiere “políticas reales y activas para la clase trabajadora que persigan la eliminación de las brechas sociales de desigualdad”.