Actuar contra la pobreza energética debe ser una prioridad.
IU-CLM busca acabar con una lacra en nuestra región, donde 1 de cada 5 viviendas no pueden mantenerse en condiciones óptimas de temperatura en invierno por falta de recursos.
Martínez: “Todo el mundo tiene derecho a unos mínimos para vivir con dignidad: alimentación, agua, energía y vivienda son cuestiones innegociables y objeto de acción prioritaria para IU en los próximos meses”
Izquierda Unida de Castilla La Mancha ha puesto en valor su firme apuesta por acabar con la pobreza energética (entendida como la incapacidad de obtener una cantidad adecuada de servicios de energía por el 10% de la renta disponible) y que le llevará a legislar para garantizar este derecho básico para las personas. Además, ya adelantan que, al igual que con la energía, la alimentación, el agua y la vivienda estarían en la misma situación.
Desde la formación aseguran que en la actual situación de pobreza energética ha influido enormemente la privatización de estos servicios. Así, hemos visto como las grandes eléctricas, una vez privatizadas, han aumentado sistemáticamente el precio de la electricidad (además de incorporar a ex políticos a sus consejos de administración). Unas condiciones que llevan a una comunidad como Castilla-La Mancha a ver, según datos de diciembre de 2013, como 1 de cada 5 viviendas no tiene una temperatura mínima idónea en invierno.
Daniel Martínez, Coordinador Regional de IU-CLM, ha asegurado que su formación no dejará pasar la oportunidad que les ofrezca el pueblo y llevarán esta cuestión a todas las instituciones donde tengan representación. No es de recibo, ha asegurado, que las familias no puedan calentarse en invierno o desatender necesidades personales por no tener agua caliente. No puede ser que este país siempre priorice el beneficio de los que más tienen, de los ricos y poderosos, echando el peso sobre las familias.
Así, Martínez apuesta por una renacionalización del sector energético, al igual que apuestan por las remunicipalizaciones del agua allí donde su gestión sea privada, y, además, un fuerte polo público de la energía que permita, según sus palabras, desarrollar las energías renovables y superar la dependencia energética de las energías fósiles y siempre sin recurrir a la energía nuclear.