La caída del IPC interanual muestra la mala salud de la economía regional.
IU-CLM destaca que las políticas de austeridad seguirán constriñendo la economía regional, impidiendo que salgamos de la crisis y que nuestro avance sea sólido.
Martínez: “La sociedad necesita un impulso que tiene que venir por la mejora de los salarios y de las prestaciones sociales, la seguridad en el empleo que una persona tiene y la recontratación del personal despedido. La solución debe venir por abajo y no cebando a créditos a los de siempre”.
Izquierda Unida de Castilla-La Mancha ha valorado esta mañana la caída, en un 0.3%, del IPC interanual, situándose este índice en un acumulado de – 0.6% en 2014. Se consolida así una situación de deflación en la economía. Este problema afecta tanto a los precios en general como a los subyacentes. Estos resultados nos ponen en el entorno de un año con estancamiento, generando una débil situación del crecimiento, lo que afecta enormemente a la economía y a la creación de empleo.
El Coordinador Regional de IU-CLM, Daniel Martínez, ha explicado que la aparición de la deflación es la consecuencia de continuar en una recesión económica o de crecimiento muy débil, justo al revés de lo que el Partido Popular quiere trasladar a la ciudadanía. Esta cuestión termina afectando al desempleo que, como vemos, sigue en datos inasumibles para una sociedad moderna.
Martínez ha destacado que, en la economía de mercado en la que vivimos, un periodo de intensa deflación hace que las ventas se retrasen, que obtener dinero sea más difícil, se venden activos reales y financieros de forma rápida y desordenad, etc… lo que provoca un daño muy importante a la economía actual, tal y como está concebida.
De esta manera, Martínez ha explicado que en España, como en Castilla-La Mancha, la amenaza de la deflación se debe, fundamentalmente, al sobreendeudamiento privado, a las políticas de austeridad y a la reducción salarial, puesto que todo ello deprime la capacidad adquisitiva de la población, creando una espiral de reducción del consumo y bajada de precios.
Por último, Martínez ha puesto sobre la mesa la solución a esta situación (que no pasa por fomentar el crédito como indican desde la UE) que no es otra que aumentar la demanda interna. Eso se consigue con el aumento de los salarios y la seguridad en el empleo, mejoras de las prestaciones sociales, mayor gasto en educación y sanidad recontratando al personal despedido o no contratado, etc…